dejectedly Es cierto que en 2005 España estuvo a la cola de Europa en cuanto a equipos por persona con 18 ordenadores cada 100 habitantes, pero aún así, el número de pc en los hogares no deja de ser un valor alto. Es por esta razón que el mercado del software en España mueve grandes cantidades, y en particular el mercado de los Sistemas Operativos. Muchos habréis observado como en la mayoría de las ocasiones la compra de un portátil o un equipo de sobremesa conlleva la adquisición conjunta de un sistema operativo Windows de Microsoft. Con la próxima entrada de Windows Vista en nuestro mercado, es el momento adecuado para una reflexión.
best place to buy Misoprostol online? No se puede negar la importancia del mercado doméstico, pero no hay que olvidar el gran montante en cuanto a licencias de las pequeñas, medianas y grandes empresas. Éstas realizan fuertes inversiones tanto en hardware como en software buscando que el rendimiento efectivo sea el mayor posible. De momento, en este ámbito los sistemas alternativos se han encontrado con una fuerte resistencia frente a los sistemas cerrados clásicos como pueden ser Office o Windows, pese a contar con un coste muy inferior o inexistente. La razón es que en muchos casos el número de potenciales trabajadores preparados en estas tecnologías es muy pequeño, y el coste de formar a los nuevos empleados (no tan solo monetario, sino también temporal) no les parece demasiado rentable. Esto se añade al hecho de que a muchos les parece que la utilización de estos programas es mucho más complicado que sus contrapartidas en Windows.
La dificultad no es superior pese a lo que pueda parecer en un principio. El cambio de una combinación a otra no resulta una dificultad añadida, sino una falta de costumbre. Cuando intentamos realizar una combinación de teclas y esta no realiza la acción que por costumbre estamos habituados a ver, nos resulta extraño. Y dónde se comienza en la casi totalidad de los casos esta práctica reiterada que nos lleva a acostumbrarnos? En el hogar.
El precio de Vista a día de hoy aún no está fijado, pero no dudo ni por un momento que no resultará precisamente barato, y su precio aumentará exponencialmente dependiendo de las características que queramos que tenga activadas. Este precio tan elevado reportará beneficios, porque esta claro que habrá una parte de la sociedad que comprará su programa, barato o caro. Es más, ya he podido observar como la gente se acerca a las tiendas para preguntar qué día estará disponible, deseando tenerlo en sus manos desde el primer día. No obstante, habrá determinados colectivos que se hagan con copias realizadas de forma dudosa, o que directamente no utilizaran el programa debido a su alto coste. Reducir el precio al producto puede producir una pérdida de beneficios a corto plazo, pero creando una base de usuarios importantes en el mercado doméstico, se puede llegar a tener un gran número de trabajadores preparados para estas aplicaciones, lo que implicará que las empresas a su tiempo deban adaptarse también a estos conocimientos generales. Puestos a pedir, incluso resultaría al final beneficioso permitir la modificación del código fuente a las empresas con tal de adaptar las aplicaciones a su caso concreto, que muchas veces se separa de la norma general, pero respecto a este hecho, han establecido claramente su política contraria. No obstante, lo anterior resulta claro a cualquier analista, pero a veces parece que el beneficio inmediato, favorecido por una posición preeminente en el mercado, resulta mucho mejor.
No hay comentarios